Debemos de manifestar igualmente nuestra inconformidad, de la manera como ASAA viene atropellando a toda la población Riohachera y los intereses que como ciudadanos tenemos. Observamos inquietantemente, que el gobierno municipal tampoco sienta una posición, ni la autoridad para exigirle a esta empresa, una buena prestación del servicio que hoy está causando, que nuestra niñez, nuestros adultos mayores, nuestras comunidades wayuu, estén padeciendo de graves enfermedades que atentan contra su vida. En gran parte de los barrios de Riohacha, sus habitantes tratan de conseguir el agua con sus propios recursos, pero hay ciudadanos que ni siquiera pueden asumir esos gastos y les toca recurrir a pozos de los cuales, varios están contaminados.
No hay una responsabilidad ni de las empresas ni de la administración, para asumir lo que por ley le corresponde, generando una serie de situaciones que afectan la prestación de los servicios públicos y que definitivamente están llevando a que los ciudadanos, se revelen en diferentes protestas.